El juez electoral de Rodríguez Saá celebra su boda a puro lujo: la fiesta de $5.500.000 en un palacio

El juez que siempre fue noticia por fallos sospechados y funcionales al poder está nuevamente en boca de todos. Coronará la boda con la fiesta del año.

Ruta llega al excelso momento con un nuevo escándalo por un juicio millonario que se sustancia en su fuero. Su trayectoria está plagada de cuestionamientos que le valieron ser uno de los magistrados más desprestigiados.

"Pasaron los años, y al final llegó el día que tanto todos esperábamos…nos casamos", acuñó la pareja en la tarjeta de invitación que trascendió más allá de los invitados. Fue uno de los primeros detalles que se deslizó del enlace de un fiel exponente de la justicia de Rodríguez Saá.

Ruta eligió el palacio que resguarda el espíritu estético de la Belle Époque. De estilo neoclásico y versallesco. El mismo lugar donde se casaron Wanda Nara con Mauro Icardi en 2014 y Pampita con Roberto García Moritán en 2019. Es además uno de los más costosos de Sudamérica para realizar este tipo de eventos.

Las escaleras del Sans Souci fueron recorridas por Madonna en el rol de Evita.

El “Oyarbide de San Luis”, se ha mantenido en la línea de poder. Un soldado de Alberto Rodríguez Saá, que desde la justicia responde fiel y servicialmente.

Su estilo de vida se sobrepone al resto de sus pares y en el “mundillo” judicial es nombrado con el apellido del fallecido juez del prostíbulo Spartacus que intercambiaba impunidad judicial a cambio de favores políticos para continuar en el cargo y otros beneficios.

Justamente los favores al poder le han permitido sobrevivir en la magistratura.

José Agustín Ruta y Antonia Judith Cangiano contraerán enlace el 24 de setiembre a las 18.

“Regalos?  El mejor regalo que nos poder hacer es tu presencia puntual en el Palacio para disfrutar y celebrar la vida". Hasta el lunes hay tiempo para confirmar la asistencia.

Para hacer realidad su sueño, el juez deberá abonar, nada más y nada menos que alrededor de $5.500.000 para una fiesta de alrededor de 100 personas.

La cifra, es clara. Mucho más de lo que gana un juez en un año de trabajo.

En los jardines del palacio estarán presentes figuras de San Luis y no está confirmada aún la presencia de Alberto Rodríguez Saá, a quien habrían invitado especialmente para que disfrute de la velada mientras recorre los fastuosos salones y el jardín de 9 hectáreas diseñado por el paisajista francés Carlos Thays.

El Sans Souci ofrece "elegancia, clase y glamour" para las parejas que eligen uno de los salones más caros. El edificio magistral se encuentra en la pintoresca zona de Victoria, Buenos Aires, y ofrece prestaciones únicas, difíciles de encontrar en otro lugar. Se construyó entre los años 1914 y 1918 y es uno de los más representativos de la arquitectura europea del país. Su estilo se inspiró en el Palacio de Versalles y el arquitecto fue Renè Sargent, un francés enamorado del diseño renacentista.

La reserva única del Sans Soucci para una boda es de $ 3.000.000 en concepto de alquiler, espacios de libre participación y ambientación. No incluye el catering, que si bien se puede elaborar en el lugar se sugiere una serie de pocas empresas que pueden brindar el servicio a la altura de las necesidades del Palacio.

El portal El Puntano consultó a la firma Gonzalo Lanús Catering Boutique que habitualmente prepara el menú para el palacio y sus celebraciones. El servicio más básico, por comensal, para una velada de 8 horas que incluye una recepción, entrada, plato principal, mesa de tortas y postre y fin de fiesta, ronda los $ 16.000, cifra que puede cambiar si se agregan tragos exclusivos, variedades de platos, aperitivos y barra. Teniendo en cuenta el valor base se suman 2.5000.000 al presupuesto.

En concepto de alquiler y catering los novios deberán desembolsar $ 5.500.000. Esta cifra millonaria se engrosará cuando se evalúen otros costos, ya cancelados, como alojamientos para la pareja y familiares, vestido de novia de alta costura, honorarios de una exclusiva y muy reconocida wedding planner, entre otras tantas contrataciones.

Ruta, un juez del poder

Su carrera quedó teñida al poco tiempo de lograr la investidura en la magistratura. Una humilde familia de Estancia Grande fue despojada de sus tierras para poder construir en el lugar la sede del municipio que había soñado el gobernador.

Siempre en el centro de la escena, cobró notoriedad cuando intentó, en el año 2017, frenar el reconocimiento del partido político del actual diputado Nacional, Claudio Poggi.

En ese entonces quedó en evidencia definitivamente que el juez Ruta no respondía a lo que establece la ley, sino más bien a lo que le indicaban desde Terrazas del Portezuelo.

En mayo del 2017, después que Claudio Poggi, realizó un “acampe” por 4 días en los pasillos judiciales, el magistrado finalmente le informó sobre el reconocimiento al partido Avanzar.

Allí, ante toda una provincia que seguía el minuto a minuto de la situación, el juez confirmó su lealtad a Alberto Rodríguez Saá al intentar dilatar los tiempos al extremo con el objetivo de impedir el reconocimiento del partido. Meses después como juez Electoral formó parte de una maniobra pergueñada desde Terrazas del Portezuelo para proscribir al Frente de Poggi. La Corte Suprema desbarató la operación política judicial y obligó al Superior Tribunal a dar marcha atrás y habilitar la participación de la alianza opositora.

El caso Zanella

Los años pasaron y en el 2019, otra vez el juez Ruta salió a la luz. Esta vez envuelto en la venta de la emblemática marca de motos, cuya fábrica estaba en San Luis.

Ruta aprobó la venta de la emblemática marca a la empresa que hizo la oferta más baja. Se desconoce porque no aceptó la que propuso más del doble y seguir con la producción en San Luis.